
Como punto de partida, la Ley obliga a que el autónomo que va a recaer en uno de estos ficheros sea avisado; ya que debe tener la posibilidad de abonar la cantidad que adeuda para cancelar o rectificar el impago.
No obstante, de no ser así, los datos del deudor procederán a ser incluidos en una lista de morosos. Cabe destacar que el nombre del negocio solo podrá permanecer en estos ficheros un máximo de 6 años.
Si por cualquier caso fuese necesario realizar una comprobación de la situación del negocio, el autónomo tendría que dirigirse a uno de estos ficheros de morosos para certificar la inscripción de su nombre en ellos:
– RAI
– ASNEF o Asociación Nacional de Entidades de Financiación
– Experian Bureau Empresarial
– Infodeuda
– RIJ o Registro de Impagados Judiciales